Ser gordo no creo que le guste a casi nadie, pero es cierto que algunas personas llevan bastante mejor ser gordas o rellenitas que otras. Para esas personas que no llevan bien ser gordas tienen la opción de hacerse una liposucción o ponerse un balón gástrico, aunque esa solución es un poco más radical que la liposucción.
Una de mis amigas ha decidido hacerse una Liposuccion Pontevedra para así poder bajar de peso de una vez por todas. Desde que conozco a esta chica siempre ha estado bastante rellenita y ya estaba cansada de los comentarios que tenía que escuchar de todo el mundo. No sé porque la gente no puede estarse callada cuando se trata de gordos, ya es bastante duro ser gordo como para que te lo estén recordando a cada sitio al que vayas. No todo el mundo tiene la fuerza de voluntad para comer lo que tiene que comer y que no le engorde demasiado, porque sí que hay mucha gente que come más cantidad que las personas que están gordas pero tienen la suerte de que no engordan en absoluto. Estas personas que no engordan da igual lo que coman no saben la suerte que tienen y si algo me ha enseñado la experiencia con estas personas es que les da igual, ni tan siquiera se han parado a pensar en ello.
Personalmente, para bajar de peso prefiero ir a sudar al gimnasio que tener que hacerme una liposucción, más que nada porque no me gustan mucho los hospitales e intento ir lo menos posible, aunque haya veces que no quede más remedio que tener que ir. En el gimnasio puedes conseguir bajar de peso pero os advierto que no va a ser nada sencillo, va a ser duro y va a haber que esforzarse, que es lo más complicado de todo porque por norma general a los gordos no nos gusta esforzarnos. Sufrimos demasiado cuando nos tenemos que esforzar, pero ahí radica la belleza de hacer deporte. Si el deporte no fuese tan duro todo el mundo lo practicaría y todos sabemos que no es así.