La búsqueda de un nuevo y mejorado tratamiento dermatológico del acné en Vigo es una constante entre los especialistas del sector. Por este motivo, el consumidor actual tiene donde elegir, pero no todas las terapias son igual de atractivas. Son las soluciones indoloras y no invasivas las que vienen cosechando un mayor éxito.
Un claro ejemplo es la mesoterapia facial, tratamiento que combate las cicatrices y lesiones del acné vulgar a través de microinyecciones con vitaminas, antioxidantes y otros compuestos benéficos para la piel. En concreto, sus microagujas de mesopen son muy precisas y proporcionan resultados óptimos contra las pústulas, pápulas o los nódulos característicos de esta dolencia.
Las ondas electromagnéticas también han demostrado su validez para corregir los síntomas del acné. En particular, la radiofrecuencia facial se sirve de estas ondas para sanar las cicatrices hipertróficas y neutralizar la proliferación de la Cutibacterium acnes y otras bacterias. Asimismo, contribuye a estimular la producción de colágeno y optimizar la firmeza de la piel.
Por su parte, los inductores o fillers de colágeno son otra solución no invasiva que consiste en rellenar las lesiones del acné con rellenos biocompatibles, como la policaprolactona o Ellansé. Sus resultados, aunque no inmediatos, son duraderos en el tiempo. Además, es un tratamiento indicado para rejuvenecer la piel.
En el microneedling o terapia de inducción de colágeno, se utilizan las micropunciones para incentivar el nivel de colágeno y elastina en la piel. En tratamientos antiacné, puede restaurar el cutis dañado por las cicatrices secundarias de esta enfermedad inflamatoria.
Además, las marcas e imperfecciones de las pieles afectadas por el acné pueden tratarse con la exfoliación por láser. Este procedimiento elimina las cicatrices y manchas más superficiales, no acarreando dolor ni molestias para el usuario, al que se aplica una anestesia tópica antes de cada sesión. No obstante, se desaconseja su uso en pieles oscuras.